Desde hace varios años los acontecimientos laborales en la Warner se vienen sucediendo, pero se complican mucho más desde que entraron los nuevos propietarios y desde que la Comunidad de Madrid se deshizo de su accionariado.
Contratas, subcontratas y más subcontratas es la política de empleo precario y basura a la que nos vienen acostumbrando estos “especuladores”.
Y todo ello, producto de una pésima gestión por parte de Esperanza Aguirre, deshaciéndose del “paquete”, que le dejó su compañero de partido Ruiz Gallardón, sin haber intentando siquiera un protocolo de política laboral con los compradores ni nada que se le pareciera.
La inmobiliaria gallega Fadesa, que controla el 73,8% del capital, desde que se hizo cargo y encargó la gestión a Parques Reunidos, sólo tiene como objetivo la reducción de masa salarial, una reducción de plantilla, que se compensa con el aumento vertiginoso de las subcontrataciones.
A principios de temporada, la empresa aprueba un Plan de Bajas Anticipadas - al que se acojen algunos trabajadores y trabajadoras - con el que los sindicatos no están de acuerdo.
Lo que sí acordaron y firmaron por ambas partes fue un total de 522 jornadas completas para el año 2008, como resultado de unos indicadores que contemplaban además de muchas otras cosas, la masa salarial.
A pesar de que el 2008 ha sido un buen año para el Parque, a los mandos de la Warner ya no les vale ese acuerdo, por lo que proponen a los sindicatos un ERE (Expediente de Regulación de Empleo) o iniciar con un proceso de despidos inmediato; motivo por el que se han venido realizando las concentraciones y huelgas de las que todos hemos sido conocedores meses atrás.
Los vacíos laborales que se han ido produciendo en estos últimos meses, producto del Plan de Bajas Incentivadas, se han estado cubriendo con la ampliación de subcontrataciones, y no conformes con eso, en la última reunión mantenida hace unos días con el Comité de Empresa les dicen que sobran 38 personas (con nombres y apellidos) y que inmediatamente serán despedidas.
Por este motivo, el Comité de Empresa de la Warner el día 5 se encerrará en el ayuntamiento de San Martín, como medida de presión para que se den soluciones inmediatas, además, de tener programado para el día 15 y el 29 de este mismo mes, concentraciones en la Asamblea de la Comunidad de Madrid.
¿Cuándo y de una vez por todas, se hará un plan serio de viabilidad de la Warner? ¿Cuándo dejarán de presionar, buscando lo que todos sabemos que esta operación esconde?
Exigimos al gobierno de San Martín, y en primer plano a la alcaldesa, un posicionamiento firme y rotundo, que termine de una vez por todas con los intereses especulativos y con el futuro crecimiento residencial del Parque Temático y sus aledaños. Y si no es esa la línea que defienden nuestros regidores, que también lo digan.